Los principales enemigos del correcto funcionamiento del
foro y que un moderador debe controlar, son:
Spam: la publicación de mensajes no solicitados,
generalmente publicitarios, de forma caótica o en contra de las reglas del
foro.
Trolls: usuarios cuyo único interés es molestar a otros
usuarios e interrumpir el correcto desempeño del foro, ya sea por no estar de
acuerdo con su temática o simplemente por divertirse de ese modo.
Leechers: usuarios que solo desean aprovecharse.
Además los foros también pueden sufrir ataques de crackers y
similares.
Arqueólogos: usuarios que se dedican a revivir post
antiguos.
Chaters: usuarios que en foros, chats, y otros medios,
escriben en un lenguaje corto, simplificando palabras al igual que en el SMS, o
que intencionalmente no respetan la ortografía, presentando una escritura poco
comprensible por otros miembros del foro.
Fake: usuarios que se hacen pasar por otros miembros.
Usuarios títeres: usuarios que están inscritos en el foro
dos o más veces, haciéndose pasar por diferentes miembros, pero los
administradores pueden acabar con esto mirando periódicamente las IP de los
usuarios.
Aunque no son enemigos, los newbies (recién llegados) pueden
ocasionar problemas en el funcionamiento del foro al cometer errores; ya sea
por no poder adaptarse rápido a la comunidad o por no leer o entender las
reglas específicas que tiene el foro al que han ingresado recientemente. Su
acogida dependerá de los usuarios y moderadores que tenga el foro. Igualmente
pueden producir estos problemas usuarios más antiguos que producto de su
conducta se les denomina lamer.
En foros implantados, también es posible la aparición de
bullyers o el comportamiento como tales de algunos miembros nuevos o antiguos.
Este comportamiento se detecta por su toma de partido inmediato en discusiones
de miembros con prestigio. El bullyer reacciona con inusitada agresividad,
frecuentemente insultando a una de las partes como mecanismo para intentar el
acercamiento personal a una de las partes en conflicto. Con frecuencia este
comportamiento degenera hasta convertirse en un auténtico maltratador
psicológico, que mina la participación del usuario al que hostiga
sistemáticamente cada vez que interviene. La actuación de los bullyers es
contraria al principio democrático de funcionamiento de los foros y elimina la
posibilidad de disentir y debatir. Hay que diferenciar este problema del de los
trolles, ya que el resto de los usuarios se convierten en cómplices pasivos y
es fundamental percibir al administrador de que puede estarse dando una de
estas situaciones.